Palabras

Éste es el primero. Probablemente de muchos o de pocos. No soy periodista ni pretendo serlo, pues respeto demasiado la profesión y más que todo, al verdadero periodista. La búsqueda de información es uno de mis pasatiempos y mientras más aprendo, me doy cuenta que no he aprendido lo suficiente. Papi siempre fue mi ejemplo de que la construcción y la buena conceptualización de las palabras era una virtud. Su perlesía cerebral no era limitación para ser el centro de atención. 

Desde que llegó el siglo 21, siento que la modernización no se ha detenido. Mi primera computadora tenia 512 megabytes de RAM y ahora si no tienes una de 4 gigabytes, te puedes quedar bien pegaito frente a la computadora. Las palabras no han sido diferentes. Estamos en una época donde se usan las mismas con el propósito de herir y no de sanar ; de destruir en vez de construir y cada día le damos una conclusión indeseada. 

Este espacio no tiene el propósito de crear reacciones, pues ésta es mi perspectiva. No pretende crear una opinión en alguien. Probablemente, mis palabras tengan las mismas intenciones que usted que tiene, o quizás no. Pero en definitiva, es un espacio, que por más pequeño que sea, tiene la intención de construir. Las palabras que se leerán aquí, tratarán de nacer desde la objetividad sin ofender a nadie. 

A usted que me lee, no soy alguien importante ni mucho menos una influencia. Vivo en un mundo complejo al igual que usted, dónde la desinformación y la malinterpretación de los sentidos es el "mainstream". Esto es una marota, porque es una combinación de cosas y temas sin ninguna prioridad en particular. La única prioridad es crear un espacio para mi, y al final del día, si usted tiene la intención de apropiarse de él, así lo haga.

Gracias,

Pedro